Todo empezó cuando Maite estaba jugando en el patio y se le atoró su cabecita en un barandal de fierro, fue un momento muy fuerte para papá, la abuela y para mí porque lloraba de dolor, la logramos sacar (está perfectamente bien) pero se quedó muy sensible. Después de eso están jugando con unos goteros y si hermana se los arrebató, fue la gota que derramó el vaso, Maite explotó cómo nunca lo había hecho, estuvo en estado de supervivencia y desconectada mucho, pero mucho tiempo, a mi me parecía eterno el llanto, lo que hice fue acompañarla y solo sentarme junto a ella a respirar (parecía que ni funcionaba y eso nunca iba a acabar) después de mucho rato aceptó que la abrazara y en eso sí hermana vino a abrazarme también y eso detonó de nuevo su "berrinche" , en ese momento Maite no quería compartir a su mamá.
Mi mamá (la abuela, se portó de maravilla me ayudó con la otra niña pero me dejó llevar todo el proceso), papá estaba trabajando pero cuando pudo fue sorprendente cómo no le tuve que decir nada, solito se sentó junto a mi y así acompañamos a Maite que seguía estallando. Después de mucho pero mucho rato ya era hora de la leche, Maite ya estaba más tranquila y le expliqué que me tenía que ir a darle leche a su hermana y ella llorando se paró y vino conmigo y también tomó leche.
Tengo varias preguntas y observaciones.
Siento que lo que realmente terminó el llanto fue el pecho y no me gusta porque siento que se rompió el proceso
No supe muy bien como explicarle lo que había pasado, solo le dije que no le había gustado que su hermana le quitar el gotero, que se había molestado y que había estallado.
3. Antes de dormir papá y yo le explicamos que está muy bien sacar nuestras emociones y que la queríamos mucho en todos sus estados de ánimo, feliz, triste, enojada etc.
Según yo lo había hecho muy mal pero ahora que lo escribo suena mejor de lo que creí.
Alguien por ahí o Lety que me ayuden con la retroalimentación ???